Por un momento te lo has creído. Has comenzado algo, y con mucha ilusión. Esta vez sí, esto lo voy a acabar bien. O por lo menos, lo voy a acabar.
Y entonces llega ese instante en que te das cuenta de que eso también lo vas a dejar a medias.
Me cuesta mantener la motivación en mis proyectos. Y eso cuando los empiezo. Tal vez por eso me dedico a hacer payasadas de 10 segundos en vez de ponerme de una vez a componer una sonata. Porque, aunque comience una, no la voy a terminar.
Es una putada. Parece pesimismo. Parece que no me esfuerzo, que tiro la toalla antes de empezar, o que la tiro en el primer asalto. Tal vez lo sea. Pero es que estar luchando 14 asaltos para acabar rindiéndote de todos modos... Y, al fin y al cabo, la improvisación te permite hacer la música del momento. Aunque una buena sonata... no se puede improvisar.
A veces "me doy asco a mí mismo", lo reconozco. Y me pregunto. Me pregunto si merece la pena el esfuerzo. Y cada día obtengo una respuesta...
Es muy triste reconocerlo, pero más triste sería ignorarlo. Y es que me temo que necesito de una obligación externa para completar lo que comienzo. Ay....
viernes, 27 de febrero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Te entiendo completamente, me pasa igual, jaja.
ResponderEliminarLo que hago normalmente es entusiasmarme con una nueva idea o proyecto. Parece que esta vez me voy a poner las pilas y realmente lo voy a concretar. Pero poco a poco voy perdiendo el interés, y queda en la nada.
Por otro lado, cuando algo externo me obliga o me indica que debo hacerlo, entonces lo hago… pero ya no con el mismo entusiasmo, sino más bien por obligación.
Jeje, veo que no soy el único al que le pasa...
ResponderEliminarLa verdad es que cuando hay que acabar algo por obligación, casi siempre pierde el interés. Sin embargo, los primeros momentos de creatividad, mientras dura la ilusión, son maravillosos.
Es duro afrontar estas cosas, pero, si existe algún modo de mejorarlo, seguro que es necesario conocerse y comprenderse a uno mismo antes...
Gracias por tus comentarios, Carolina. Me ha parecido interesante lo que dices, he leído algo de tus blogs y he decidido seguir el más reciente. Jeje, no te sientas obligada a escribir, no querría quitarte la ilusión en tu nuevo proyecto ;)